Un ventilador axial es un tipo de ventilador que tiene sus aspas giratorias alrededor de un eje paralelo a la dirección del flujo de aire. Esto es distinto de los ventiladores centrífugos, que se utilizan para mover el aire en la dirección perpendicular al eje radial. Los ventiladores axiales ayudan en la aplicación en la que se requiere mover altos caudales de aire en distancias cortas, como en sistemas de refrigeración de dispositivos electrónicos o edificios.

La construcción de un ventilador axial incluye un eje con un cubo montado que contiene varias aspas. El movimiento angular del eje provoca la rotación de las palas y la advección de aire a lo largo del eje de rotación. El perfil de las aspas y su orientación angular tienen un gran efecto en la eficiencia y el rendimiento del ventilador. Los ventiladores axiales se utilizan a menudo debido a su construcción simple, su precio más bajo y su capacidad para mover grandes cantidades de flujo de aire a través de ellos.

Tienen sus desventajas, una de ellas es si el ventilador necesita soplar aire a larga distancia o superar altas presiones: un ventilador axial tendría un rendimiento deficiente en comparación con el ventilador centrífugo. Esto se debe a que, la energía cinética del aire que se descarga del ventilador siempre será mayor que la energía suministrada al aire mientras el ventilador está encendido, perdiendo así algo de energía. Sin embargo, para la mayoría de los casos en los que se deben suministrar grandes volúmenes de aire con una presión moderada, los ventiladores axiales siguen siendo adecuados y bastante efectivos.